sábado, 13 de agosto de 2016

CUANDO DOS NO SE ENGAÑAN

Ya la pasión comienza a ser recuerdo
En estas horas de la madrugada
En las que dos son uno sobre el lecho,
Y cuentan más los besos que el mañana.
Ni tú ni yo mentimos al mirarnos:
Sin amor en los ojos, sin palabras,
Soñar nos trajo a esta remota playa,
Y en ella estamos solos, aguardando
Que nos desuna y nos distancie el alba.
Dos corazones libres naufragaron
En un mar de caricias: eso es todo.
Como no habrá un “después”, en esta historia
Sobran promesas e ilusiones vanas.
Si acaso, un fugaz guiño, una sonrisa,
Cuando la luz del sol venga a borrarla.  

1 comentario: