sábado, 13 de diciembre de 2014


Cuesta aceptar que no me abrirás nunca
La puerta como antaño;
Que ya no estás pendiente de mis pasos,
Ni aguardas mi regreso.
Tampoco yo me acerco hasta la calle
En la que ayer estaba el paraíso.


2 comentarios:

  1. Supongo que habrá que pasar página y guardar los buenos recuerdos en la cajita que palpita. Besos

    ResponderEliminar
  2. Encontré tu blog por casualidad pero tu poesía me ha encantado, un saludo desde Brasil.

    ResponderEliminar