Ahora que el mundo y sus pudores nos deja ser nosotros,
Despierta.
Tus labios son antorchas que iluminan e inflaman
Sentimientos.
Más allá de nuestras soledades, desnudos y en silencio,
Besémonos.
Bajo un dosel de estrellas, sobre un lecho de sueños,
Amémonos.
La noche no tiene porqué ser las cenizas del día.
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